Desde que la tecnología se ha integrado en nuestras vidas para hacer un uso cotidiano de ella, existe un importante debate sobre cómo asegurarnos de que niños, niñas y adolescentes puedan estar seguros navegando en la red. Desde tener claro a qué edad debe un menor tener un dispositivos, hasta las recomendaciones de uso también para adultos, los puntos de vista son variados.

Si bien es verdad que debemos trabajar para reducir riesgos en el uso de la tecnología, también es cierto que las normas se siguen escribiendo al tiempo que aprendemos a educar con ayuda de la tecnología. Pero hay algo contundente: más allá de dar o no un smartphone a un menor, es claro que la formación y la educación digital, se han establecido como el sistema más efectivo para luchar contra los riesgos en internet. Y esto cuenta para niños, niñas, adolescentes e incluso adultos.

Para ofrecer seguridad a nuestros menores, padres, madres y educadores deben estar informados y capacitados para lidiar con la tecnología. El informe ¿Qué papel juega Internet en el día a día de los más jóvenes y a qué riesgos están expuestos con su uso? publicado en 2022 por Panda Security afirma que los padres apenas tienen conciencia de la importancia de proteger los aparatos electrónicos de sus hijos de los ciberdelincuentes, tanto en el centro escolar como en casa.

“El 66% de los progenitores no sabe si su hijo ha sufrido en alguna ocasión algún ataque a través de su móvil, ordenador o tablet”.

Lo cual pone en evidencia aún más la importancia de crear conciencia en practicas regulares de ciudadanía digital, así como educar e informar acerca de buenas prácticas de ciberseguridad.

El papel crucial de la formación en el uso responsable de la tecnología y ciberseguridad

La formación en el uso de la tecnología y ciberseguridad no solo implica la adquisición de conocimientos técnicos, sino también el desarrollo de una mentalidad preventiva y consciente.

Es importante que, como instituciones y líderes educativos, decidamos invertir en programas de capacitación que abarquen una variedad de temas, desde la identificación de correos electrónicos sospechosos hasta la implementación de protocolos seguros para el manejo de información.

Aquellos padres, madres y educadores que tengan acceso a información, podrán aconsejar de la mejor manera a sus hijos, hijas y estudiantes en el uso seguro de dispositivos y plataformas.

Beneficios de la formación en ciudadanía digital y ciberseguridad

1. Desarrollo de conciencia situacional y pensamiento crítico: Los usuarios aprenden a reconocer señales de alerta y comportamientos sospechosos.
2. Reducción de riesgos: La formación constante ayuda a reducir la vulnerabilidad ante ciberataques.
3. Cultura de seguridad: Fomenta una cultura de uso responsable y empático donde la seguridad digital es una prioridad compartida.
4. Actualización continua: La tecnología y la ciberseguridad son campos dinámicos; la formación asegura que los usuarios estén al día con las últimas amenazas y medidas preventivas.

Educación digital: La base para una sociedad cibersegura

La educación digital va más allá del ámbito profesional y se extiende a todos los niveles de la sociedad. Desde las escuelas primarias hasta las universidades, es crucial incorporar currículos que enseñen y acompañen a los estudiantes sobre el uso responsable de la tecnología y prácticas de ciberseguridad.

Estos programas deben cubrir aspectos básicos como la creación de contraseñas seguras y el reconocimiento de intentos de phishing, así como temas más avanzados como la criptografía y la gestión de riesgos.

Y no solo debemos considerarlo por temor a sufrir algún ataque, sino porque la tecnología es ya parte fundamental de nuestras vidas, y sobre todo, parte del futuro de los niños y niñas que hoy empiezan a experimentar con ella. Limitar sus capacidades y todo lo que implica para ellos en su futuro profesional, por la falta de conocimiento, podría tener consecuencias poco favorables en su desempeño.

“No podemos sacrificar el desarrollo de los menores por el miedo a los riesgos. Por eso es tan importante garantizar su seguridad mediante la educación digital… Consideramos más relevante el acompañamiento que el conocimiento, porque el primero facilita el segundo y es condición necesaria”.

Leire Lasuen, responsable de formación de Pantallas Amigas

Implementación de la educación digital:

1. Integración curricular: Incluir módulos de ciberseguridad en las materias existentes.
2. Talleres y seminarios: Ofrecer sesiones prácticas y teóricas para estudiantes y profesores.
3. Colaboración con expertos: Involucrar a profesionales de la industria para compartir conocimientos y experiencias.
4. Recursos accesibles: Crear y distribuir material educativo accesible a todos los niveles de aprendizaje.

La unión de formación y educación para una defensa eficaz

Combinar la formación en ciberseguridad dentro de las organizaciones con una robusta educación digital desde una edad temprana crea una defensa integral contra os riesgos que puedan presentarse en línea. Esta sinergia garantiza que tanto individuos como empresas estén mejor preparados para enfrentar y mitigar las amenazas cibernéticas.

Los riesgos y amenazas en línea no se enfrentan solo con tecnología avanzada; requieren un enfoque integral que incluya la formación continua y la educación digital. Al empoderar a individuos y organizaciones con el conocimiento y las habilidades necesarias, podemos construir un entorno digital más seguro y resiliente. La inversión en educación y formación en ciudadanía digital y ciberseguridad es, sin duda, la estrategia más efectiva para protegernos en el mundo digital interconectado de hoy.

Ayudamos a construir una cultura de ciudadanía digital

En Digital Family trabajamos con instituciones educativas a desarrollar un entorno de aula positivo y saludable donde la ciudadanía digital esté integrada en todos los aspectos del aprendizaje. 

A cambio, los estudiantes estarán preparados para usar la tecnología de manera responsable y significativa, y comprenderán el poder de la tecnología para bien y para mal.